Es un genio diabólico que aparece en forma de una gran serpiente como lo indica el segundo elemento de su nombre (suge ‘culebra’), y en algunos relatos es representado con siete cabezas. Habita en cuevas y sólo sale para saciar su hambre. Los animales domésticos que pastan en los alrededores de su cueva los atrae con su aliento, y de ellos se alimenta. Según otros relatos se alimenta de carne humana, y muchas de las leyendas mencionan que exige en los pueblos de su entorno que le faciliten una persona de vez en cuando para saciar su hambre, así se tranquiliza la bestia y la población puede estar tranquila por un tiempo.
¿Porque todos me odian?
Soy un ser primordial. Hermanos y hermanas de los cielos fuimos quienes, con garras y piernas escamados, moldeamos la tierra. Dimos fuego a la arena, dimos agua a la tierra. Construimos ríos, separamos continentes. Controlamos todo.
Pero el hombre no me comprende. Él me ve, grande, escamado, poderoso. Me envidia. Me teme. Me odia. Me pinta como el malo. En sus historias, yo soy el villano. El cruel. El que asesina reinos, el que devora princesas. Jamás pensaron que debajo de mi piel, quizá sólo hay un corazón.
El dragón solo busca el amor de aquellos que existen sobre la tierra. Esa tierra que tanto nos costó crear. Tenemos caracter. Claro. Somos fuerzas primordiales. Pero tambien nos enternecen los pequeños detalles.
Sueño con un día, en que cuando me acerque a una ciudad, no me disparen flechas ni me apunten con cañones. Un día en que me abran las puertas y me reciban alegres. Que me den abrazos. Que me den algún beso.
Un día en que todo el mundo deje de tocarme los huevos.
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